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29 abr 2009

Una historia sin fin que tuvo un final

No lo podía creer, por fin estaban juntos, otra vez. Habían pasado tantas cosas. Habían huido de todo, pasado mucho tiempo separados (quizás demasiado o eso pensaba ella), pero por fin estaban juntos otra vez.

Tomo su rostro entre las manos y acaricio lentamente cada rasgo de su cara. Él se que inmóvil mientras ella lo hacía sonrió, le tomo las manos. Se acercó lentamente a su oído y le susurro.

-Ya estamos a salvo, ya nada podrá ocurrirnos.

Se aparto de ella, para poder verla mejor. Estaba muy cambiada, pero tan hermosa como la recordaba. La expresión de ella era indescriptible, su rostro era una composición de emociones. Que iban desde una enorme alegría, pasando por el alivio, hasta la incredulidad. Volvió a tomar el rostro de él entre las manos, comenzó a recorrerlo otra vez, pero él volvió a apartarle las manos.

-Estoy aquí. -dijo él- Soy real, no voy a desvanecerme.

Ella soltó una risita nerviosa y bajo la mirada. Al cabo de un rato volvió a mirarle. Le regalo una de esas sonrisas que el tanto adoraba, una sonrisa tímida acompañada de un leve sonrojo, muy característica de la muchacha. Pasaron largo rato mirándose, sin articular palabra, sin moverse prácticamente. Mirándose el uno al otro como si aquella situación fuera irreal e imposible. Pero la calma y la felicidad del momento pronto se desvanecieron. Se escucho un gran estruendo y acto seguido una mueca, mezcla de sorpresa y dolor, se dibujo en el rostro de él. Su última mirada fue para ella, que se encontraba en total estado de shock, mientras el hombre al que amaba se le escapaba su último suspiro de vida. En lo ultimo que pensó antes de morir fue en que al final la volvía a dejarla sola. El cuerpo del hombre callo sin vida al suelo. Ella inmóvil no podía creer lo sucedido.

De repente, fue como despertar de un pesado sueño, todo se hizo más real y nítido. Lo vio tirado ante si, en un inmenso charco de sangre y se arrojo a su lado desconsolada. Comenzó a sollozar abrazando el cuerpo sin vida, protegiéndolo, como si eso sirviera de ayudar para que él volviera a la vida…

3 comentarios:

  1. Que triste, pero bonita la parte que se reencuentran . Jeje.
    Espero que estes bien, saludos.

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  2. Amar más allá de las distancias y el tiempo, que el sentimiento cruce las fronteras de la vida, para residir en los eternos campos del recuerdo. Triste y romántico.

    Saludos.

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