Una y otra vez ocurre lo mismo. Encuentras a alguien. Se hace tu amigo, y además parece que le gustas. Te pones nerviosa, cierras tus barreras al máximo. Pero él va penetrando poco a poco hasta que las hace caer todas. Empiezas a ser consciente de que a ti también te gusta. Te acercas, tonteas. Pero empiezas a indagar en él y descubres que hay otra. Siempre hay otra. Tú le gustas, pero a ella la ama. Los primeros días es horrible. Tienes ganas de llorar, de gritar y destrozarlo todo. De olvidarle y no volver a verle. Pero él es tu amigo, te quiere y se preocupa por ti. Le odias y le quieres al mismo tiempo. Y al final después de mucho pensar, como siempre, te tragas tu orgullo, sonríes y sigues siendo su amiga. Le ayudas, le escuchas, y hasta le ayudas con ella. Al principio es insoportable, pero cuando le ves feliz, riendo, todo eso se pasa. Sabes que siempre le vas a tener hay para lo que le necesites, y muy en el fondo sabes que prefieres tenerla como amigo que no volver a verle. Todo pasara y aparecerá otro, y puede que vuelva a pasar lo mismo que las últimas veces. Y en tu interior resuenan las palabras: " Puede que este echa estar sola, pero rodeada de amigos, eso no lo dudo"
Os quiero pedorros!!
disfrutaa!!! :3
ResponderEliminarDisfruta de las vacaciones :) Por cierto, me gusta el color de tu flequillo ;)
ResponderEliminarBesos^^