Él horrible ser se paseaba intranquilo mientras murmurabas cosas. Yo estaba cada vez más asustada. ¿Nueva existencia? ¿De qué estaba hablando? Yo no me sentía muy distinta ¿o sí? No sabía qué hacer. Mire al ser desesperada.
-Y ahora ¿Qué voy hacer?-pregunte
El rostro de la criatura paso a ser algo más compasivo.
-Ahora pequeña, te voy a enseñar lo que eres. No es algo agradable pero debes aprenderlo.
El ser me explico todo cuanto debía saber para mantenerme viva. Me explico que creía que el sol nos dañaba. Nunca lo había comprobado pero no quería arriesgarse. Que no debía evitar alimentarse, por muy cruel o repulsivo que me pareciera, pues si no acabaría con su aspecto. Me dijo que su horrible apariencia se debía a que se intento rebelar contra su nueva existencia y eso provoco todas las mutaciones que había sufrido. Después me enseño a cazar. No fue algo agradable, pero me explico que nunca sería algo agradable, pero era algo imprescindible. Después se dispuso a marcharse. Le agarre por el brazo.
-¿Por qué me dejas?-pregunte angustiada
-No puedo hacerme cargo de ti-dijo con desesperación- Lo siento de verdad. Pero agradece que me recuerdes a mi mismo cuando me transformaron. Si no, ni siquiera me abría molestado en enseñarte. Y ahora escúchame atentamente. No hagas estupideces. Haz todo lo que te he enseñado y todo irá bien. Adiós.
-¡Espera!
Grite a la nada, porque ya se había ido. En ese momento no sabía qué hacer. Simplemente me quede allí plantada. Pensando.
Corto pero intenso. Es generoso por la parte de este ser dejarla, pero si no desea dañarla lo mejor es alejarse.
ResponderEliminarEspero que estés bien de tu enfermedad.
Adoro como escribes :)
ResponderEliminarMe gusta mucho la historia, ¿va a continuar? =D
Besos
Muy bueno. Me encanta. Y la criatura oscura me identifica, actuamos por compasión o bondad solo en raras, muy raras ocasiones. Voy a seguir pasandome.
ResponderEliminarSaludos.