De nuevo por estos lares

Sorprendentemente y sin yo me lo espere parece que por aquí sigue pasando gente... (o eso o bloger me dice que tengo visitas porque es maligno... tendre que meditar sobre ello...) Pero eso como parece que sigue pasando gente y sobre todo porque ultimamente me aburro mucho XD Me parece que es un buen momento para intentar retomar este proyecto. Aunque si os digo la verdad me importa un cojon si lo leeis o no. Esto siempre a sido para mi y para poco más. Aquí me desahogo y suelto mis verborreas mentales de cuando me da la inspiración paranoide. Y aunque considero que con el paso de los años cada día escribo peor, como soy yo la única a la que le tiene que importar os jodeis. Y si no os gusta no lo miréis (sin pretender ser borde XP).


Cierro los ojos he intento imaginar. Calada tras calada intento que la realidad se deshaga. Consigo poca cosa, como últimamente estoy bloqueada. Escribo frases sin sentido, trato de estar inspirada. Consigo poca cosa por lo que veo de esta chorrada. Ademas todas frases "riman"... vaya cagada.... Tarto de que mi mente vuele como hacía antes, pero creo que la imaginación de antaño se a escapado poco a poco de mi... no se si me reulle o si simplemente ya no tengo nada sobre lo que escribir... lo que se es esto empieza a parecer una tonteria... No se ni para que lo intento... Pero en el fondo tengo tantas ganas de escribir. Lo echo de menos... aunque ya nunca se sobre que...

Música

Cuando la música entra por sus odios todo desaparece. Deja de pensar, y el mundo se desdibuja. La recorren por dentro las nota, haciendo palpitar cada célula de su cuerpo. La mente se traslada por mundos irreales y subconscientes, en los que los sonidos tienen formas físicas y materiales. Se deja llevar. Se agita al son de la música. No siente nada más. Todo vibra, fluye, se mueve. Nada es lo que parece. Vaga sin rumbo entre un sinfín de cuerpos y rostros, pero ella no ve nada. Solo se deja llevar por la música. Se agita, salta, grita. Baila sin pensar en nada ni en nadie, más que en ese ritmo que la revuelve sin que ella pueda controlarlo. Las luces la deslumbran, el ambiente la envuelve. Sonidos extraños, colores psicodelicos. Unos ojos la miran, se acercan y la paralizan. La agarra por la cintura y la atraen a él. La besa con pasión, mientras todo a su alrededor se ralentiza.
- Hola preciosa ¿Me ha echado de menos?
Ella echa a reír y no contesta. Ella baila y canta para él. Porque ahora que él a llegado todo se desdibuja otra vez. Pero ahora el centro de su todo es él y nada más que él. Y gracias a él, ella se siente grande, poderosa, preciosa, indestructible, imparable, VIVA.

Solo Sexo

Eres otro mundo.
Eres lo desconocido.
Eres lo excitante.
Eres la experiencia.
Eres lo indecente.
Eres lo prohibido.
Eres lo intocable.
Tan lejos y tan cerca.
Miradas que matan, miradas que marcan.
Suspiros en las sombras.
Volutas de humo que se elevan incesantes.
Deseo en cada calada, en cada mirada.
Sonrisas en la distancia.
Roces disimulados.
Gestos que dicen tanto sin palabras.
Tu cuerpo contra el mio.
Tus labios por mi cuello.
Te quiero dentro mio.
Sentirte en lo mas profundo.
A escondidas siempre sin que nadie sospeche.
Es tan excitante.
Mis labios cortados de mordelos sin cesar deseando que sean los tuyos.
Tu lengua extremeciendo mi alma.
Follame en cada instante, cuando no nos oigan, cuando nadie este presente.
Posee mi cuerpo como si fuera tuyo, haz conmigo lo que quieras.
Eres un chico malo, eres lo inalcanzable,
y en momentos inestables llenas mi cuerpo con tu presencia.
Las horas transcurren.
Los momentos me aburren.
Espero tu llamada...




y poder terminarte esa mamada...

Domingo

Está sentada cn la piernas cruzadas en el banco de piedra. Dejando que el verdor del parque llene su alma, o eso es lo que pretende. Escucha una y otra vez la misma canción. Su cuerpo se mueve lentamente al ritmo, sin ser consciente de ello. Calada tras calada los cigarros se consumen. El humo escapa lentamente de sus labios, mientras piensa distraída. Canta frases a voz en grito sin temor a que nadie la oiga. Hoy no le importa nada. Está sola, pero conforme. Se replantea una y otra vez su vida. Le da vueltas a las cosas y nunca llega a ninguna conclusión. Pero eso hoy no le preocupa. Otro momento que pasa, otro domingo. Esta cansada de la de semana, pero no le importa. Hoy tan solo por un momento es feliz por el simple hecho de estar viva. Disfruta del instante, porque es fugaz y escurridizo. Se ríe de si misma, y se plantea una y otra vez porque normalmente la vida parece tan complicada, cuando en ese momento que no hace nada, es feliz. Pero decide no darle vueltas. Ya tendrá tiempo mañana de pensar en lo complicado de su existencia, en los errores cometidos y de la rutina. Coge otro cigarro, lo enciende con placer, cierra los ojos y deja que la música inunde su mente. Es su momento de la semana y no permitirá que nada ni nadie lo estropee. Por un momento dejara de pensar, por un rato estará sola, por un instante sera feliz.

Se hace tarde y el frío hace que se estremezca. El viento agita suavemente su pelo, y unas cuantas gotas de lluvia mojan su rostro. Respira hondo y disfruta un segundo más de su momento. Se pone el abrigo, recoge sus cosas y camina tranquila. Mira por un ultimo momento el banco de piedra, rodeado por los árboles y sonríe. Marcha hacia casa con calma, cantando y bailando. Despreocupada. Y deseando que aunque en su vida no sea perfecta, momentos tan simples como aquel, puedan hacerla feliz.

Suicidio

Con mano firme pero delicada deslizó la cuchilla por su antebrazo izquierdo, dejando una fina linea roja, que empezó a manar con suavidad. El dolor del corte estremeció su cuerpo a la vez que la sangre se derramaba. Lágrimas de tristeza caían por su rostro, mientras hacía lo mismo en el otro brazo. En el fondo no deseaba abandonar este mundo. Pero su alma dolorida no aguantaba ni un segundo más. Desesperación, miedo, tristeza, dolor, sufrimiento, horror, palabras que componían la realidad de su mundo. Felicidad, belleza, alegría, seguridad, amor, cosas que jamás sintió. La vida se escapaba lentamente de su cuerpo, mientras admiraba los cortes de sus brazos. Como algo tan macabro podía ser tan hermoso, fue algo que jamás comprendió. Cerro los ojos y se recostó en el frío suelo. Y en aquel momento le rogo a la vida, a Dios, a quien quisiera escuchar su plegaria, que por lo menos la muerte no fuera dolorosa. No necesitaba otra vida después de aquello, lo único que quería es no tener que volver a sentir nada nunca más.